La mayoría de las personas tiende a relacionar la nutrición y la alimentación con la pérdida de peso o la salud del corazón, sin embargo, la dieta puede afectar directamente a los pies y a otras partes del cuerpo.
Debemos entender que nuestros pies están conectados al resto de nuestro cuerpo y dependiendo de lo que comemos día a día es como nuestro cuerpo se desarrolla.
Uno de los problemas relacionados con la nutrición que pueden afectar a los pies es la inflamación a causa del exceso de peso que nuestros pies deben soportar día con día. Esta inflamación puede aparecer como fascitis plantar, la cual causa dolor en la planta del pie y tobillos. La fascitis plantar también se presenta comúnmente por correr en exceso o estar de pie en plataformas muy rígidas por tiempos prolongados.
Desafortunadamente, gran parte de la dieta que el mexicano promedio consume hoy día provoca inflamación, como granos refinados, azúcares y grasas tans en muchos alimentos horneados y comida chatarra, así como grasas saturadas.
Si en la dieta diaria se incluyen muchos de los alimentos antes mencionados, sugerimos que se reduzcan sus porciones y se sustituyan por una alimentación más balanceada que mejore la circulación de la sangre, reduzca la inflamación y facilite la digestión como:
Grasas Omega-3:
- Salmón
- Atún
- Sardinas
- Nueces
- aguacate
Frutas:
- Manzana
- Plátano
- Melón
Verduras y hortalizas:
- Alcachofa
- Espárragos
- Tomate
- Pepino
- Berenjena
Naturalmente, una dieta balanceada ayuda a bajar de peso y por ende ayuda a reducir la presión en los pies y la inflamación.
Dos problemas comunes entre los mexicanos son la enfermedad arterial periférica y la diabetes. Estas condiciones pueden causar dolor en los pies al dañar las arterias que llevan sangre a sus extremidades y en ambos casos se requiere de orientación médica profesional para recibir una dieta más específica.
Si requiere más información o realizar una consulta sobre el estado de los pies de tus pequeños, llámanos y agenda una cita.